jueves, 24 de mayo de 2012

Sobre pintura,con Juan Jesús

Nuestro compañero Juan Jesús(De http://www.ipmsespana.es/ ) ha pillado lo del "Codazo,codazo guiño guiño" a la perfección por lo que se ve y me ha mandado este articulo,que os pongo abajo, sobre sus experiencias con las pinturas(Y podéis ver la cantidad y la variedad de ellas que tiene en esta entrada colgada hace pocos días), técnicas,consejos y mas cosas.Muy completo y altamente recomendable.Muchas gracias,caballero!;)

"Por petición de Agramar (guiño), comentaré alguna cosilla de las pinturas que utilizo y las técnicas, un poco por encima, que el tema tiene mucha miga.
Los tópicos se cumplen casi siempre, y “cualquier tiempo pasado siempre fue mejor”, no iba a ser una excepción en el mundillo de las pinturas. Para mi gusto, las mejores pinturas son las Citadel antiguas (las del bote redondo), que ahora se siguen fabricando bajo la marca de Coat d’ Arms, tengo botes desde que empecé a pintar que están perfectamente e incluso botes más antiguos que compré por ebay y conservan todas sus cualidades.  La pintura cubre bien, no se salta con facilidad, y diluida funde bien a la hora de hacer luces y sombras.

Todas estas cualidades se pueden extender a todas las gamas que ha tenido GW en general, el problema es que con cada cambio de fabricante, aparte del cambio de tono de los colores, aunque compartieran el mismo el mismo nombre, y la progresiva disminución de la cantidad de pintura,  el aumento del precio inversamente proporcional que se ha producido en la gama de Citadel y no menos importante el cambio del formato de los botes, que cada vez son peores, hacen muy poco atractiva esta gama.
La otra gama que más uso son las de Vallejo, casi todas las que uso son Model Color, las ventajas que tiene es su enorme variedad de colores, que el diseño de los botes se ha mantenido en el tiempo y la cantidad de pintura también, sus tonos son contantes, y no dejan de ampliar su gama, la pintura funde muy bien. Las desventajas de este tipo de pintura, también le pasa a la de Andrea, es que se desconcha con facilidad, solo con rozar la figura con el dedo o aplicar un pincel seco se levanta. Las suelo utilizar sobre todo para dar luces y sombras y las mezclo con Citadel para darlas más resistencia en las capas base. Me comentaron que las Game Color eran más resistentes, pero ahora mismo solo tengo dos botes de esta gama y no lo he comprobado. No podemos olvidar la gama de médiums, efectos y demás que tiene Vallejo
Con la llegada del aerógrafo, amplié mi “colección” a las pinturas de Tamiya, la mayor diferencia es que son acrílicos al alcohol y no se pueden mezclar con las otras marcas;  las utilizo sobre todo para pintar vehículos de W40k aunque las he probado recientemente para pintar unos caballeros grises y me han dado buenos resultados. La clave es utilizar el disolvente para aerógrafo adecuado, después de muchas pruebas, lo mejor es el thinner de la propia Tamiya, pero el del tapón amarillo (que tiene varios) que también vale (en general) para Citadel y Vallejo. Si utilizas alcohol las pinturas acrílicas normales no cubren bien, pero el thinner soluciona ese problema.
Ya que hemos repasado las gamas de pintura, un breve análisis de los “truquillos” que más utilizo. El primero de todos, es el “dipping” como se llama ahora (los nombres en inglés siempre son más cool ^^) una técnica denostada y odiada a partes iguales, pero que para pintar ejércitos (o cuando tienes una ingente cantidad de miniaturas para pintar y no dejas de comprar más…) te ahorra mucho tiempo, al crear todas las sombras de una “pasada”. Empecé el “dipping” utilizando la técnica del betún de Judea, se mezcla un poco con barniz Marabú mate, hasta que alcance la “oscuridad” deseada, y se aplica por toda la figura, luego le das las luces de forma habitual y “listo”. Las ventajas, a parte del tiempo, es que refuerzas la miniatura con una capa intermedia de barniz, quitando por ejemplo la gran desventaja de las pinturas de Vallejo; las desventajas, que suele quedar un aspecto un poco sucio en ciertos colores, sobre todo blancos y tonos fríos, pueden quedar pegotes de barniz que tapen detalles y que se creen zonas muy oscuras, por lo que no es muy recomendable para figuras que te quieras “currar” más. El siguiente paso fue el descubrimiento del Quickshade de Army Painter, que viene a ser como un betún, pero ya todo mezclado, y mucho más homogéneo, los resultados son mejores, la “oscuridad” es constante, con las mismas ventajas e inconvenientes que la técnica del betún. La gran diferencia (después de mucho ensayo y error) es que el Quickshade queda brillante, y la pintura le cuesta un montón agarrar sobre él, (o es directamente imposible) así que hay que trabajar las luces antes de aplicarlo.
El otro “truco” que más que un truco, supuso una “revolución” en mi forma de pintar, fue la paleta húmeda. Como decirlo suavemente, ¡la paleta húmeda es lo mejor que se ha inventado desde las guerras del Peloponeso¡ :D. Te permite trabajar prácticamente como si utilizases el Photoshop para pintar miniaturas, te mantiene las mezclas “fresquitas” por si tienes que retocar algún paso. Puedes preparar con antelación las luces y las sombras y concentrarte solo en la aplicación de la pintura. Y un ejemplo, mi primera figura pintada aprovechando las ventajas de la paleta húmeda:
Los marines son de las miniaturas más difíciles de pintar, por la armadura, que tiene zonas muy grandes y planas todas del mismo color, el “truquillo” que uso para pintarlos, es una combinación de técnicas, pero la verdad es que obtienes unos resultados muy buenos con relativamente poco esfuerzo. Lo primero que hago es dar la capa base y un par de subidas de luz con el aerógrafo, luego les doy un pincel seco muy suave, con una luz más clara, pero solo a las aristas de la armadura  y en algún punto de máxima iluminación cenital (como la parte de arriba de las hombreras, casco, etc.). Luego pinto los detalles, cartucheras, granadas, armas, etc. Normalmente con un par de subidas de luz, un poco más fuertes de lo normal, ya que luego les vamos a “bañar” en Quickshade. Una vez seco el baño, (que es mejor a pincel, porque el “dipping” es demasiado sucio) pinto los últimos detallitos, los ojos, gemas, aplico las calcas, y perfilo la miniatura donde le haga falta. Y por último un buen barnizado con el aerógrafo. El resultado queda así:
Creo que el objetivo final es que las miniaturas queden bien, limpias, luminosas (u oscuras y tétricas según se mire ;) ) sin importar las técnicas o métodos que se hayan utilizado, lo ideal además sería no poder saber cómo se pintó la miniatura y simplemente disfrutar del resultado final. Y esto es todo de momento, gracias a Agramar por su excelente blog, y por la oportunidad de hacer esta entradilla, un saludo."

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